¿Sabías que el método científico no es solo para genios en batas blancas haciendo experimentos en laboratorios? Uno de mis primeros aprendizajes fue crear productos con una metodología, y así redescubrí un viejo amigo: el Método Científico. Sí, ese mismo proceso que nos enseñaron en la escuela es una joya oculta para las personas que trabajamos en productos.

A través de su estructura de mejora continua y su enfoque en la experimentación y la validación, podemos aplicar sus principios para crear soluciones digitales más efectivas y eficientes.

Te cuento cómo aplicarlo cada uno de los 7 pasos, para transformar ideas en soluciones que realmente tengan impacto en las personas y en el negocio. Para ello, vamos a desarrollar un problema de una app ficticia de fitness en cada paso para hacerlo más práctico y aplicable.

1. La chispa inicial: Encontrar un problema

Esto se traduce en identificar un problema específico que las personas o el negocio tienen que enfrentar. ¿Cómo podemos mejorar la experiencia de usuario en nuestra aplicación móvil? Esta es una pregunta que podría desencadenar la búsqueda de una solución innovadora.

Vamos a la práctica

En nuestra app de fitness, hemos notado que, a pesar de tener una buena base de personas activas, muchas de ellas no logran conectar con sus amistades dentro de la aplicación. Esto nos lleva a preguntarnos: ¿Cómo podemos mejorar la función de conexión entre amistades para incrementar la interacción y el compromiso de las personas en nuestra app?

La pregunta guía sería: «¿De qué manera podemos facilitar que las personas de nuestra app de fitness se conecten y se motiven mutuamente, mejorando así su experiencia de usuario y fomentando una mayor retención?»

2. La búsqueda del tesoro: Investigación de contexto

Antes de lanzarte a la piscina, sumérgete en la fase de investigación. Esto significa comprender a fondo el mercado, los deseos y comportamientos de tus personas y qué están haciendo tus competidores. Esta etapa es el faro que guiará tu mejora.

Vamos a la práctica

Investigamos el comportamiento de nuestras personas y descubrimos que, aunque les interesa la idea de competir y compartir logros con amistades, encuentran el proceso de conexión demasiado complicado o no lo suficientemente visible en la interfaz de usuario.

Descubrimos que nuestros competidores permiten la conexión entre personas a través de redes sociales o contactos del teléfono de manera más intuitiva. Esto nos sugiere que debemos explorar formas de simplificar nuestro proceso de conexión.

3. La apuesta: Formulando una Hipótesis

Con los datos en mano, es momento de hacer una hipótesis educada. Por ejemplo, «Si hacemos el proceso de compra más simple, aumentaremos las conversiones en un 10%». Tu hipótesis debe ser clara y medible.

Vamos a la práctica

Basándonos en nuestra investigación, nuestra hipótesis podría ser: «Si hacemos más visible y sencillo el proceso de agregar amistades dentro de la app, aumentaremos las interacciones entre personas en un 20% en los próximos tres meses«.

Nuestra hipótesis se centrará en la implementación de una funcionalidad que permita a las personas conectar con amistades con solo dos clics, usando los contactos de su teléfono o su cuenta de alguna red social popular.

4. Manos a la obra: Experimentación

Ahora, vamos a lo que más nos gusta: experimentar. Desarrolla un prototipo o funcionalidad basada en tu hipótesis y pruébala en el mundo real. La clave aquí es la estructura de tu experimento, debe permitirte medir los resultados de manera precisa.

Vamos a la práctica

Desarrollamos un prototipo que incluye una nueva sección llamada «Conectar con amistades», accesible directamente desde la pantalla principal, con opciones para sincronizar contactos y conectar a través de redes sociales.

Lanzamos una versión beta de la aplicación con esta nueva funcionalidad a un grupo pequeño de personas para recoger sus retroalimentaciones y observar cómo mejora la interacción entre ellas.

5. El veredicto: Evaluación del procedimiento

Con tu experimento en marcha, observa y registra qué tal va. ¿Está tu solución cumpliendo las expectativas? Si la respuesta es no, es hora de pivotar. Esta fase es crítica para el ajuste fino de tu propuesta.

Vamos a la práctica

¿Funciona el Procedimiento?

Monitoreamos las interacciones de las personas en la versión beta y notamos un aumento en las solicitudes de amistad y en las actividades compartidas, pero también recibimos comentarios sobre mejoras necesarias en la interfaz.

Ajustamos la funcionalidad basándonos en el feedback recibido, simplificando aún más el proceso de conexión y mejorando la visibilidad de la opción en la interfaz.

6. El gran análisis: Analiza los datos y saca conclusiones

Una vez recogidos los datos, es momento de analizarlos con lupa. ¿Apoyan tu hipótesis? Este paso te revelará si estabas en el camino correcto o si necesitas replantear tu estrategia.

Vamos a la práctica

Los datos muestran un aumento significativo en la interacción entre personas y una mejora en la retención de personas activas, lo que respalda nuestra hipótesis inicial.

Concluimos que simplificar la conexión entre amistades dentro de la app efectivamente mejora la experiencia de usuario y fomenta una mayor actividad y compromiso en la plataforma.

7. Iteración: El viaje continúa

El final de un experimento es solo el comienzo de otro. Los datos recogidos alimentan nuevas preguntas, abriendo camino a una espiral de mejora y conocimiento continuo.

Presentamos los resultados del experimento a nuestro equipo y partes interesadas, destacando el impacto positivo en la interacción entre personas y la retención. También planeamos compartir un caso de estudio en nuestro blog para la comunidad, destacando cómo escuchamos y actuamos en base a sus necesidades y opiniones.

Vamos a la práctica

La comunicación se centrará en cómo esta nueva funcionalidad ha hecho que sea más fácil para las personas de nuestra app de fitness conectarse con amistades y motivarse mutuamente, subrayando nuestro compromiso con la mejora continua de la experiencia de usuario.

Conclusión

El método científico es esencial en la creación de productos, permitiendo tomar decisiones basadas en evidencia y no en suposiciones. A través de un proceso de preguntas, investigaciones, hipótesis, experimentación y análisis, las empresas pueden mejorar la experiencia de usuario y la funcionalidad del producto, y así impulsar el negocio.

Sin embargo, es importante reconocer que la mayoría de los experimentos pueden no conducir directamente a mejoras o resultar en fracasos. Estos «fracasos» son, de hecho, cruciales para el proceso de innovación, ofreciendo aprendizajes valiosos y ayudando a refinar estrategias.

Se menciona a menudo en el contexto de la epxerimentación, que la tasa de fracaso podría ser tan alta como el 80-90%, aunque esto incluiría resultados que van desde fracasos totales hasta aquellos que simplemente no cumplieron con las expectativas o tuvieron un impacto limitado.

Un regalo final

Para que no te quedas sin hacer nada y ponerte manos a la obra, he preparado un template especialmente diseñado para facilitarte la aplicación del método científico en el desarrollo de productos digitales.

Contiene los paso a paso explicados en el artículo, espero que te ayude a validar muchas hipótesis 😀